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El Maeña 7 se impuso en la Regata Vuelta a los Roques en aguas tinerfeñas. FOTO: NPL

El Maeña 7 se impuso en la Regata Vuelta a los Roques, que tuvo lugar este sábado con un recorrido de ida y vuelta entre Santa Cruz y la Punta de Anaga. La embarcación patroneada por Andrés Monje afrontó con éxito una competición marcada por el viento cambiante. Segundo fue el Silentium, de Antonio Fernández. Estos dos fueron los dos únicos barcos que entraron en tiempo.
 
La Regata Vuelta a los Roques fue organizada, un año más, por el Real Club Náutico de Tenerife (RCNT), que de esta forma retomaba su calendario de competición de la clase Crucero.
 
La salida se dio a las 11 de la mañana, a la altura de la playa de Las Gaviotas, con viento del nordeste entre 18 y 20 nudos, pero con rachas que alcanzaban los 30. Pero una vez las embarcaciones doblaron los Roques de Anaga, el viento empezó a bajar y a soplar del sur, haciendo acto de presencia la lluvia. En estas condiciones, los barcos grandes, como el Maeña 7 y el Silentium estaban más avanzados que el Rosmar, de Mariano Carlos Hinojal, y el Lausamar, de Jorge Sbert.
 
La flota acabó atrapada en una encalmada y los dos primeros fueron los únicos barcos que entraron antes de la seis de la tarde, que era la hora límite.