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El barco brasileño ganaba la primera manga de las Barclays 52 Super Series en Capri. FOTO: MartinezStudio

Nadie podía imaginar lo que pasó este miércoles en Capri. Ni en las más de dos horas que duró el aplazamiento de las Barclays 52 Super Series en la plácida e idílica isla de Capri. Ni con tanto tiempo para hacer cábalas nadie pudo barruntar que el Phoenix iba a ganar la primera regata oficial en esta prestigiosa competición. Le hubieran llamado loco.

Es un barco que acaba de salir del astillero de King Marine en Valencia. Un barco con una tripulación en la que los días de entrenamiento conjunto no superan las quince jornadas. Es un barco que el patrón no es profesional. Es más, Eduardo de Souza ya pinta canas, pero ayer todo esto no fue un óbice para que el Botin&Carkeek venciera en la primera manga de la Rolex Capri Sailing Week.

Y ocurrió. Eduardo de Souza Ramos, el armador brasileño nacido en 1944, llegó a Capri y ganó la primera de las mangas de la Rolex Capri Sailing Week. Había que frotarse los ojos. Nadie se lo podía creer. El barco, con una tripulación latinoamericana, dio todo un recital en el agua para dominar desde el primer paso por barlovento hasta el final de la manga. De Souza llevó el barco por donde le dijo Santiago Lange y el argentino hizo el trabajo soñado. No falló en ninguna decisión táctica y el resto de la tripulación hizo todas las maniobras con el suficiente tino para ganar la primera manga.

El lado de babor del campo de regatas estaba claramente favorecido por un viento flojo de unos ocho nudos que tardó mucho en entrar en Capri. Y Lange lo tuvo claro desde el primer momento porque se fue a ese costado y de ahí ya nadie le movió. Por ahí también se fueron los grandes favoritos a ganar la manga, Quantum Racing, Azurra y Rán Racing, pero en una dura ceñida el barco brasileño logró una ventaja de cuatro esloras sobre el Quantum en ese primer paso por barlovento.

Volvió al lado favorecido del campo (la derecha en la empopada) y Quantum y Azurra decidieron trasluchar para buscar recortar distancias. Lange se quedó donde pensaba que podía funcionar. Lo mismo hizo Ran. Y ahí se decidió la manga porque estos dos barcos consiguieron un importante margen en la puerta de sotavento.

A partir de ahí solo había que calcar la táctica y no fallar en las maniobras, algo que podría ser muy lógico en una tripulación recién reunida. Y no fallaron. Controlaron al Rán Racing de Niklas Zennström al que siempre tuvieron a medio minuto y abrieron un gran hueco con el resto. Azzurra con Guillermo Parada a la caña completó el podio.

El feliz armador y caña del Phoenix, Eduardo de Souza, se mostraba muy feliz al término de su primer día de regatas en las Barclays 52 Super Series. “Ha sido una experiencia fantástica. Nunca pensé que alguna vez iba a ser así. Pero hemos hecho una muy buena salida y llegamos en una buena posición a la boya. Ha sido un gran regalo y yo estoy tan feliz. Es una experiencia que nunca voy a olvidar.  Las condiciones eran muy similares a los mundiales de ‘Star’ cuando estuve aquí hace muchos, muchos años. Navegué aquí en 1986. En Capri, las ensaladas Caprese son tan buenas y las vistas son espectaculares. La segunda manga ha sido una vuelta a una realidad. Fue todo lo contrario a la anterior. Hemos hecho una mala salida. El campo de regatas no te da muchas opciones. Pero aún así, estuvo bien porque llegamos cerca de otros barcos. Hoy hemos aprendido mucho”.

Control de Quantum Racing

La segunda manga volvió a demostrar que el que sale bien tiene muchas opciones de acabar arriba. Y así lo hizo el Quantum Racing patroneado por Ed Baird. El velero norteamericano partió por el lado correcto y, de nuevo, se fue a buscar el lado izquierdo del campo de regatas. No pudo hacer lo mismo el Phoenix que salió tapado y tuvo que marcharse por estribor en busca de vientos más limpios y tras pelarse con Rán Racing.

Junto a Quantum estuvo toda la manga el Vesper. El velero de Jim Swarzt fue muy consistente en toda la jornada su ‘plata’ en la segunda manga le ponen arriba en la clasificación.

Quantum no tuvo rival. Desde el principio navegó por donde quiso y eso es una gran ventaja con vientos ligeros. No hubo quien le diera caza y se volvieron al puerto de Capri con un cuarto y un primero que les deja líderes de la clasificación.

Terry Hutchinson, táctico del Quantum Racing, no estaba muy contento con su trabajo: “Ed y los chicos han hecho un muy buen trabajo hoy, con dos salidas increíbles. En uno de los cruces con Phoenix de la primera ceñida creo que no estuve acertado porque no viramos a la vez y creo que debimos hacerlo. Tuvimos un poco de ‘jetlag’ también en la trasluchada y nos pasaron Azzurra y Rán. Pero la segunda manga ha sido muy buena. No me quito de la cabeza mis errores en la primera manga, como mínimo deberíamos haber sido terceros”.

Tras ellos se encuentra Azzurra, que fue el barco más regular el primer día. Pasó todas las boyas de la jornada en la tercera posición. Nunca se movió de ahí lo que le ha permitido al barco de Guillermo Parada ser segundo en la general a sólo un punto del Quantum Racing. El Rán Racing, que venía de ser segundo, se hundió en la segunda manga tras una mala salida y finalizó octavo, sin capacidad de reacción en una igualadísima flota.

El caña argentino de Azzurra comentaba al finalizar la jornada que “con el poco viento que hacía y con las condiciones que había en el campo de regatas lo más normal era cometer errores hoy y estar detrás. Pero hacer dos sólidos resultados es una buena manera de empezar. Estamos contentos con la velocidad del barco y queremos mantenerlo así pero la semana es muy larga. La clave hoy ha sido tener salidas limpias y tener el barco bien preparado. Hacía tiempo que yo no llevaba la caña en las salidas (Francesco Bruni, ausente en Capri, es el encargado habitual) pero he estado practicando duramente estos días y hasta me lo he pasado bien hoy. Italia es la casa de nuestro barco y tenemos siempre una gran motivación por hacerlo bien aquí. Esperamos seguir haciéndolo así hasta el final de la semana”.

Para este jueves están previstas tres mangas más, a la espera de que sople más viento que el primer día. Aunque las previsiones no son muy halagüeñas en la Isla.