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Imagen desde el aire del Vestas Wind encallado. FOTO: NCG Operations Room

La tripulación de Team Vestas Wind ya está de camino a la civilización tras dos días en una isla desierta en el océano Indico. Un banco de arena, tal y como lo ha descrito el propio Chris Nicholson, donde, además, abundan los tiburones, y no hay comunicación con el exterior.

El equipo encalló con su barco en el archipiélago de St Brandon el pasado sábado cuando navegaba a 19 nudos, y se vieron obligados a abandonar el barco a primera hora de la madrugada del día siguiente, tras lo que se abrieron paso con agua hasta la rodilla a una zona seca del arrecife.

Allí fueron rescatados por una lancha de los guardacostas de la Ile du Sud, un islote prácticamente desierto, sin comunicaciones con el mundo exterior.

El islote recibe existencias semanalmente gracias a un barco de pesca, Eliza, que viene de la isla Mauricio, a unos 430 kilómetros al Suroeste, a un día completo de navegación. La tripulación de Team Vestas Wind ha embarcado en la mencionada embarcación de vuelta a Mauricio, desde donde volarán a Abu Dhabi a final de semana.

Neil Cox, jefe de tierra del equipo, comentaba que "es como un mal sueño. He estado hablando con los guardacostas que me comentaban todos los problemas técnicos que íbamos a tener, y me decían que les advirtiera a los chicos de que el arrecife está lleno de tiburones y barracudas y quién sabe qué más". Añadía como le habían contado que en cierta ocasión "encontraron un pescador muerto que había sido atacado por las barracudas y prácticamente no quedaba nada de él. Y yo sentado mientras escucho eso, pensando que tengo que avisar a Nicho de que vayan con cuidado si andan por el agua".

Los tripulantes llegan a Mauricio este miércoles a media mañana, literalmente con la ropa que llevan puesta, explicaba Neil Cox. "Los guardacostas de Mauricio volaron sobre el islote antes de que se fueran los tripulantes del Vestas Wind y les lanzaron coca-cola, chocolate y galletas", añadía. "No creo que nadie se pueda imaginar lo remoto que es ese lugar. Hay un guardacostas que vive en una especie de cobertizo de herramientas".

El barco ha sido desprovisto de las piezas más importantes y Cox todavía no sabe cómo lo recuperarán. El jefe de tierra ha querido destacar la profesionalidad de la tripulación tras una colisión semejante. "Lo han hecho todo tan profesionalmente como ha sido posible. No podíamos haber pedido más".

Chris Nicholson ha sido olímpico por Australia, y es uno de los regatistas oceánicos más experimentados del mundo. Respecto al accidente, ha afirmado que un error fue el detonante del mismo, sin especificar exactamente cuál.

El equipo emitirá un comunicado completo esta semana.